Y las MUJERES ¿CUÁNDO?
Ahora que estamos siendo testigos del importante papel que las mujeres árabes están jugando en las revoluciones de sus respectivos países, me cuesta trabajo entender la razón porqué, los nuevos líderes, una vez que han llegado a los puestos decisivos, nuevamente dejan fuera a las mujeres.
¿Por qué?
Este fenómeno político, o como quieran ustedes llamarle, se ha repetido a lo largo de la historia y en las diferentes culturas.
Vayamos primero a la Revolución Francesa, cuando un importante grupo de mujeres, con gran determinación lucharon y se arriesgaron al igual, o más que muchos hombres, para terminar guillotinadas y sin haber avanzado en el reconocimiento de sus derechos.
Recordemos que en el llamado “Siglo de las luces" un objetivo fue conseguir la libertad y la igualdad entre individuos; igualdad jurídica y libertad en los derechos políticos.
Al finalizar dicha revolución las personas se dieron cuenta que esta igualdad nunca fue para todos, fue solo una lucha por los DERECHOS DEL HOMBRE Y EL CIUDADANO , dejando a las mujeres sin figurar en ninguna parte; sin ser consideradas en la igualdad pretendida. Históricamente, Nicolás de Condorcet hace en su momento un análisis de la realidad y expone que los derechos y principios de las mujeres en Francia, son violados por estar subordinadas a su hogar y sus esposos.
Tenemos ahí el caso Olivia de Gouges, quien paralelamente escribiría y redactaría un código similar al proclamado como las garantían de los hombres. En su escrito esta brillante y valiente mujer preservaba la libertad, pero avocándolo a las mujeres, diciendo que ellas corren con los mismos principios y derechos:“Las mujeres podríamos ser libres, y tener derechos políticos, podríamos votar igual que los hombres”.
Frente a esta osadía, los hombres no se quedarían de brazos cruzados. Se alzaron de igual manera contra el sexo femenino apelando a que las mujeres “debían” quedarse en su hogar y cuidar a sus hijos.
Frente a esta osadía, los hombres no se quedarían de brazos cruzados. Se alzaron de igual manera contra el sexo femenino apelando a que las mujeres “debían” quedarse en su hogar y cuidar a sus hijos.
En este contexto, Olivia de Gouges es asesinada públicamente por hacer mención siquiera a estos ideales liberales para las mujeres de su época.
En este siglo XXI, las mujeres han participado activa y masivamente en la lucha por la descolonización de los países árabes y las luchas han recobrado impulso en los últimos años en el sector social, incluso se asegura que gran parte del éxito en Libia, Tunes y Egipto fue gracias al esfuerzo femenino.
Igualmente en Bahréin, Yemen o Jordania, estas mujeres derriban el estereotipo de la mujer árabe encerrada en su casa, y en el caso de Libia se han reportado terribles violaciones de mujeres por parte del ejército de Muamar Gadafi; hechos que se han repetido en la historia humana tradicionalmente.
La emancipación de la mujer ha sido una de las grandes “Revoluciones Silenciosas” que han marcado el perfil del siglo XX y el inicio del XXI, de forma espacial en los países cuya cultura musulmana, ha marginado en grado extremo a las mujeres, al no brindarles opciones de desarrollo profesional ni político, ni tampoco el ejercicio de sus derechos.
Recientemente nos estamos enterando por los medios que en Libia, los líderes rebeldes de Benghazi han anunciado una lista de nombramientos para encabezar su nuevo gobierno, dejando fuera a las mujeres que fuertemente apoyaron su movimiento de liberación.
Según una nota publicada por el New York Times, este nuevo gobierno ha aumentado considerablemente su tamaño, pero ha dejado fuera de los puestos importantes a las mujeres que lucharon incondicionalmente, pues únicamente les fueron otorgados 2 de las 40 plazas de liderazgo.
Repito ahora mi cuestionamiento inicial ¿Por qué las excluyen?
El mundo moderno ya ha dado evidencias de la urgente necesidad de que las mujeres aporten su visión en las políticas de estado, como un complemento importante a la solución de los problemas sociales.
En el caso de Libia, me conmovieron las palabras de Muna Shali, una catedrática universitaria quien participó en una Conferencia realizada con el fin de abordar el tema sobre el papel de la mujer árabe en la sociedad moderna. Ella mencionó: “…esta lucha contra el gobierno de Gadafi, tiene la intención de sentar la base para la democracia, en una sociedad que tiene décadas de estar cerrada. Ahora las mujeres deberán educar a sus hijos para esa democracia..”.
Igualmente se culpa a la falta de liderazgos femeninos, a las realidades de la guerra, en una sociedad muy conservadora que se niega a transformarse.
Pero desde mi parecer, lo que ocurre en Libia no es muy diferente a lo que ocurrió en la Revolución Francesa, ni a la realidad de la mujer mexicana después de su significativa participación en la Revolución de 1910.
Y mi pregunta sigue en pié… ¿Por qué? ¿Cuándo será el tiempo de las Mujeres?
Felicidades por el articulo.
ResponderEliminarYa es tiempo que las mujeres participen como se debe y creo que lo harían mucho mejor que los hombres!
As mulheres ocupam cargos no poder, sustentam a família inteira...mas em alguns países ainda sofrem humilhação e violência. Meninas aina são prostituídas ou vendidas..ainda são violadas e enganadas..mas..um dia quem sabe isso mude.
ResponderEliminarBelo texto..parabéns.
Nane
Precioso. Igualdad para todos y sobre todo respeto, que es la base de la convivencia y el desarrollo como personas y como humanidad.
ResponderEliminarLa igualdad de derechos es algo fundamental en la vida. Creo que poco a poco las mujeres van ganando terreno y teniendo mas responsabilidades que hace poco tiempo atras no tenian, creo que lentamente se esta avanzando en ese terreno, pero igualmente es muy poco en comparacion con todas las injusticias que vemos alrededor de planeta, aun en paises "desarrollados".
ResponderEliminarLo que va a acelerar el "tiempo de la mujer" son las denuncias publicas de todo acto en contra de la igualdad de derechos. Esa es un arma fundamental contra la cual nadie puede. El silencio es el arma de los que se aprovechan de la debilidad de los demas, por eso no debemos callarnos la boca.
Felicidades, muy buen artículo
ResponderEliminarNo hemos entendido aun que las tareas deben ser compartidas, peor aun que para alcanzar esos ideales debemos, las mujeres, ser mayoría proovedora y no simples administradoras, y lo que nos termina hundiendo es que en vez de destrozarnos unas a las otras, con críticas y demás debemos protegernos, siiii, tal y cual lo hace el género masculino. Dadas estas condiciones, la vía se facilita.
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